¡Pelea!

Bueno, casi una pelea.



Este fin de semana fui con unas amigas, entre las cuales se encontraba Fernanda, a una kermesse. Una kermesse es, por si acaso, un evento que organizan una vez al año los colegios para recaudar fondos para el viaje de promoción o la fiesta, donde hay tómbolas, juegos mecánicos, juegos inflables para niños, concursos, comida.



Esta vez fue la de un colegio muy prestigioso, solo de mujeres. Iba a haber un concierto de un conocido cantante, y habiamos estado esperando la hora con ansias. Casi habíamos acampado en medio del pasto, al frente del escenario, mismo Woodstock, pero me fui con otra amiga a comprar una Coca-Cola Light. Para ella, por supuesto, porque como hija de doctor se exactamente lo perjudiciales que son la sacarosa y los endulcorantes para la salud.



En fin, cuando volvimos al escenario, el concierto ya casi había comenzado y tuvimos que abrirnos el paso a través de una muchedumbre extremadamente quejosa. Tuvimos que empujar un poco a las personas, pero todo nuestro grupo ya estaba adelante, donde las habíamos dejado. Las chicas detrás de nosotros, que nos tomaron por "colonas", empezaron a rajar con roche de nosotras. De nuestra ropa, nuestro pelo, nuestro olor, y en voz altísima. Eran unas anoréxicas arrogantes, creídas y ridículas. Empujaban, gritaban, hablaban mal de nosotras, se burlaban, se reían...Unas verdaderas P-E-R-R-A-S. Una especie que nunca había conocido antes. Sobre todo una en especial, la líder. Y yo que pensaba que esas personas solo existían en "Chicas Pesadas".



Me voltié y les dije que dejaran de molestar, que se consiguieran una VIDA. Bueno, no funcionó. Se picaron aún más. Me dijeron que me consiguiera un nuevo estilista. Estaba demasiado molesta, pero concentrada esperando a que comenzara el concierto. Además no teniamos nadie quien nos defendiera. Nuestras amigas seguían estando más adelante. De repente, mientras las estúpidas se reían, sentí algo sobre mi cabeza. Lo toqué y era un chicle. ¡Me habían pegado un chicle en la cabeza! No me iba a quedar así. Yo ya estaba planenado mi venganza. Comenzó el concierto. Todo el mundo gritaba. Nos olvidamos de asunto. Al menos esas chicas. Cuando terminó y todo el mundo se empezaba a ir, Se volvieron hacia nosotras y empezaron a decir tonterías y a burlarse del chicle que aún no conseguía sacarme. Soy, la mayoría de veces, muy paciente. Fernanda no.



Con su metro setenta y cinco, se alzó de puntitas, empezó a agitar su Coca-Cola y la abrió, dejando caer su contenido espumeante sobre todas esas huecas insoportable. Nos reímos como locas y salimos disparadas, dejando atrás a una multitud de exclamaciones y carcajadas de espectadores.

Lo mejor es que sé que hicimos lo correcto. Sabíamos que se lo merecían, porque nosotras no les hicimos nada. La mayor parte de sus insultos, la escuchamos sin protestar, pero había alcanzado un punto de frescura tremenda, por no decir otra cosa.

Y sobre el episodio de Christine, todavía sigue apestando nuestro sitio.

Bueno chicos, creo que Adriana ya puso su primera entrada. Este es un nuevo proyecto. No sabemos que tal saldrá, pero tenemos expectativas =). Yo soy christine, y como ya deben saber este es un proyecto que tengo con Fer y Adri (no le gusta que le digan asi, pero yo me divierto haciéndolo).

Bueno, podría pasarme mucho tiempo contándoles como soy, pero... no. Muy aburrido, ya se darán cuenta mientras este blog vaya tomando forma.

¡Hoy pasó algo horribe! Estabamos en clase de historia y yo estaba un poco distraida. La verdad esa clase me aburre mucho. Es interesante, cuando la profesora habla. Tiene ideas muy "peculiares". Pero el resto de la clase es "matapasiones" (se que el término está mal empleado). Lo único que hacemoes es leer... y leer puedo hacerlo en mi casa. La verdad, prefiero escribir historias. De todo tipo =D, o siplemente dibujar. Ya me he vuelto toda una experta en materia de corazones, flores y estrellas (lo básico).
Bueno, regresando a lo de hoy, estaba dibujando en clase de historia cuando de pronto, quise sacar mi cartuchera de colores. Metí mi mano debajo de la mesa y jalé mi cartuchera. Se quedó atrcada con algo, pero insistí. Comencé a colorear y sentí un olor raro. Miré a Adri, que se sienta conmigo, y su mirada me dijo que ella también lo olía. Entendí lo que pasaba y puse mi mano dentro de mi carpeta. Sí, era mi sandía. La sandía que me habían enviado como lochera la semana pasada y que no había comido porque... no me gusta =P. La cosa es que estaba podrida, y apestabaaaa. Encima se habia derramado todo sobre mis cuadernos. Estaban todos mojados con... ¡eso!.
Me paré, conchudamente en medio de la clase, y caminé hasta el caño. Arranqué un poco de papel toalla que había al lado, y me acerqué a mi sitio. Mientras todos seguían leyendo, yo me senté en el piso, saqué todos mis cuadernos y comencé a limpiarlos, uno por uno. Lo que no me había dado cuenta era que la profesora había dejado de leer y me estaba mirando. Yo seguía ahí, ahogándome con el olor, hasta que Adri toció falsamente. Bueno, lo que sigue es predecible: la profesora me enojó, dijo que debía prestar más atención, que eso podía influenciar en mis notas y por último, dijo que si continuaba sentandome en el piso en horas de clase, enviaría una nota a la psicóloga del colegio porque estaba preocupada por mi "comportamiento extraño".

Bueno, aparte de eso, no pasó nada interesante. Fui a la librería. Tenía ganas de comprarme cosas de escritorio. Me encantan. Me compré un lapicero morado. Es de esos de marca china, que tienen colores claros, dibujos de animes y su tinta huele rico. Además me compré stickers de corazones porque quiero haces una manualidad. Ya pronto les contaré para qúién.

Bueno, me voy despidiendo. Ya pronto volveré a postear algo. Cuidense mucho. Saludos cordiales u_u.

Christine

¡Dos semanas! (Adriana)

¡Dos semanas y salimos de vacaciones de invierno! Ya no puedo esperar. Aunque se que me voy a quedar en Lima. Suena aburrido quedarse en el mismo lugar durante vacaciones, pero mi papá no me quiere llevar de viaje, ya que la última vez me perdí en el aeropuerto de Buenos Aires y casi pierdo el vuelo. Eso fue en Marzo, faltando una semana para que comenzaran las clases. Cuando subí al avión, mi papá ya estaba ahí. Con Consuelo. Obvio que ella ya lo había convencido que se subiera sin mí. ¿Quién querría perder el vuelo? No es que no me caiga Consuelo. Tampoco es que la conozca mucho. Es bonita, sí. Aunque se tiña el pelo. Aunque piense demasiado en ella misma y en sus "extraordinarios" hijos, quiere a mi papá y no me trata tan mal.

En fin, volviendo al tema. Estoy un poco celosa de que mis mejores amigas se vayan de viaje y yo no. Fernanda se va a las playas del norte. Máncora, Colán, Punta Sal. Christine se va a Suiza, como siempre. ¡Chocolates! Y yo, bueno estancada aquí. No importa. Estoy planeando en ir a Aura los Jueves y los Martes a Gótika. Talvez vaya al Boulevar de Asia y vaya a La Huaka o a Momo. Si es que no me castigan. Mejor dicho, si es que me logro escapar. Como ahora tengo "MEDIOS-hermanos", que por cierto solo conozco desde hace cuatro meses, mi papá opina que ellos tienen que vigilarme y se los pide todo el día. Ignacio no me cae tan mal, pero Sebastián (quien a la vez es medio hermano de Ignacio) es detestable. Es realmente pesado.

Como no nos vamos a ver en todas las vacaciones, hemos decidido turnarnos para publicar en un blog y de paso contar cómo nos está llendo.

Hasta ahora, puedo decir que voy a desaprobar Física y Economía. Talvez me salve con Literatura o Historia. Nunca he sido tan aplicada, así que mis expectativas no son tan altas como las de Christine. Yo no sé como puede esperar sacarse buenas notas, cuando está todo el día dibujando corazoncitos en sus cuadernos perfumados y ensayando para la obra. Yo prefiero ayudar detrás de escena. Criticar me hace bien. Por eso soy parte del equipo de producción, además de estar obligada a asistir al aburriiiido coro del colegio. Fer sí es algo sobrenatural. Es realmente sorprendente ver que una persona que usa tantas rayas, negro y se autodenomina EMO, pueda ser tan inteligente. Y eso que no estudia.

Si no jalo en ningún curso, mi papá me ha prometido que puedo volver a viajar en Octubre, en las vacaciones del tercer bimestre. La verdad es que Consuelo lo convenció de que deberiamos hacer un "viaje familiar" y él, como simpre, quedó rendido ante ella. Me empieza a caer mejor.

Adriana